EL MARKETING DE INFLUENCERS NO EXISTE

El marketing de influencers no existe. Existe el Marketing, existen las Relaciones Públicas y existen los líderes de opinión, o sea, influencers, pero en castellano.

Wikipedia nos lo aclara: “las Relaciones Públicas (… ) son un conjunto de acciones de comunicación estratégica coordinadas y sostenidas a lo largo del tiempo, que tienen como principal objetivo fortalecer los vínculos con los distintos públicos (…) para lo cual utiliza diferentes estrategias, técnicas e instrumentos (…) la publicidad, el marketing, el periodismo, entre otras ramas y profesiones. Google define Marketing: Conjunto de técnicas y estudios que tienen como objeto mejorar la comercialización de un producto.

Por lo tanto, cuando se habla de marketing de influencers, en realidad, nos referimos a una estrategia de comunicación dirigida a líderes de opinión para promover las ventas. ¡De las de toda la vida, vamos!

He leído estos días, precisamente en Internet: “el marketing de influencers no para de sonar en nuestros oídos como el típico término de moda que desde hace apenas un año se ha instalado en boca de profesionales del marketing y la comunicación. Sin embargo, (…) estas prácticas no son tan recientes para muchos de esos profesionales, y algunos datos no han dejado de sorprendernos por el grado de madurez que existe ya alrededor de esta disciplina.”.

Pues sí, hablar de marketing de influencers es solo un término de moda porque sí, es una disciplina madura: practicamos las Relaciones Públicas con este nombre desde 1822 y el nacimiento del Marketing lo podemos situar entre 1730 y 1820, más o menos.

RECOCACOLIZACIÓN

Hasta ahora, las distintas variedades de la familia Coca-Cola o en términos de marketing, profundidad de producto, habían tenido su propio diseño, imagen y publicidad. Esta nueva estrategia propone una “marca única” con el fin de identificar todas esas marcas individuales con las que hasta ahora trabajaba Coca-Cola y configurar un nuevo modelo de comunicación global. Esta estrategia, presentada en primicia en España, se ha extendido en Rusia, Singapur y Chile, aunque espera alcanzar todos los mercados.

El visionario del problema que acuciaba a Coca Cola fue Zoram Vucinic, alto ejecutivo de la compañía en Moscú, que se percató de la falta del color madre, el rojo de Coca-Cola, en los lineales de los supermercados. Los colores de los diferentes productos de la misma línea  -negro para Zero, plata para Light y dorado para Sin cafeína- se estaban comiendo el rojo de sus largos 129 años de historia.

El nuevo diseño de Coca-Cola recupera el color rojo en todos sus lineales: el color rojo como protagonista y con detalles en la parte inferior del packaging para identificar cada variedad. Un diseño que engloba todas las variedades Coca-Cola y  otorgarle así un reconocimiento de marca, a la marca matriz. Lo más cool de la historia es que este proyecto lo han liderado una decena de profesionales españoles.

Definitivamente, nos gusta el rojo.