“Nadie se baña dos veces en el mismo río” decía Heráclito. Hoy en día la realidad está en constante cambio. Nuevas circunstancias generan nuevos hábitos de consumo, nuevas formas de pensar y de ser. Todo estamos transformándonos y todos empezamos a interactuar con las marcas de forma distinta: somos más exigentes y les pedimos que sean coherentes, consecuentes y transparentes.

Las marcas que quieran sobrevivir, necesitan no solo comunicar, sino conectar con su audiencia. Necesitan convertirse en su crush (eso del engagement, eso de estar in love que tanto leemos y escuchamos), para que el consumidor se convierta en embajador y promotor (prescriptor).

Las marcas están llamadas a convertirse en marcas con propósito, marcas que por sus valores “atrapen” a su audiencia y a sus consumidores. Empresas/marcas que se conviertan en el lugar “perfecto” para trabajar. ¿Quién no desea sentirse orgulloso de su empresa y presumir que esta dona una parte de sus beneficios a los niños con cáncer, al medioambiente o a la investigación por el alzheimer, por poner un ejemplo?

Hasta aquí, todo correcto, pero, ¿qué tienes que hacer para conseguir que tu marca enamore? ¿Para convertirla en una marca con propósito?

Los 5 mandamientos de las marcas con propósito:

  1. Serás transparente sobre todas las cosas. Eso significa que también tiene que ser coherente y que transmitirá sus valores de forma clara, sin ocultar nada. Está prohibido engañar a tu audiencia o a tus clientes.
  2. Innovarás constantemente. Como marca, tienes que conocer tu mercado, dar siempre soluciones nuevas y ser fiable y auténtico. No puedes “dormirte en los laureles”.
  3. Darás en el blanco. Esto quiere decir que tu marca tiene que ser precisa en el mensaje y en los canales que utiliza.
  4. Pasarás a la acción. El storytelling está bien, pero el storydoing está mejor. Diseña una estrategia de RSC, trabájala, hazla realidad e implica a tus clientes y a tu audiencia. Hazlos partícipes y no olvides agradecerles y que se sientan “parte de tu marca”. Da un paso más, ellos pueden ser tu marca.
  5. Digitalizarás tus mensajes. La digitalización no es todo, pero sí es indispensable. Transmite tus mensajes en forma digital, actualiza tu web (es el “aparador” de tu marca), utiliza las redes sociales (con sentido común… una obviedad si eres una B2B no pintas nada en Tik Tok). Interactúa, comparte, enamora.

En resumen, con tu marca crea vínculos y fideliza con mensajes transparentes, positivos, fiables y creíbles. Como en toda relación, ese será el camino para llegar al corazón, en este caso, de tu audiencia.